![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjS_1SbgWo29oTswOtFCEONQRq0V6QiLEExwCOh1BXF-jkJkGANpDw1fckmkuygfbWu8yxBZN-70DHMHfvo6VCTXq5ljEw7UlTaG3RrmtRYkBYVzbmiaxFvwYmJVa7OrktmtIjD/s200/l_l_inicial_letra_etiqueta_engomada_roja_blanca_pegatina-p217846676050479641z85xz_400.jpg)
Con esa frase comencé este post hoy, pero sinceramente, odio tanto los lunes laborales y por que no, los lunes en general. Es el día de finalizacion de las salidas de fin de semana, el día en el que vuelves al cole, instituto o universidad (por eso los lunes nunca iba) y ahora los días en el que tienes otra vez que enfrentarte a una cruda realidad, un trabajo que no te gusta pero tienes que ejercer por culpa de la crisis y el reciclaje laboral. Si, es oficial, odio los lunes.
¡Si nuestros jefes lo supieran, quizá nos diesen el LUNES y el Viernes libre !
Por cierto, si quieres saber como sabe un lunes… prueba a beber zumo de naranja después de cepillarte los dientes.
2 Críticas constructivas:
¿¿Casualidad?? No, ni de lejos, jajaja
Entonces odiaramos el martes..
Publicar un comentario