Veamos la siguiente octavilla publicitaria.
Hay cosas que realmente dan que pensar, y ésta es una de ellas. La realidad vuelve a superar a la ficción. Como diría Ego "¿¿Esto qué es, mundo bizarro??"
Ha quedado claro ¿¿No?? No se puede ser más tonto, ni entrenándose.
El ser ¿inteligente? que tuvo la idea de publicitarse con descuentos para vender cocaina se lució.
No tardó mucho la policía de Morón de la Frontera en detener a semejante individuo que además de denunciarle por venta de sustancias ilegales deberían denunciarle por tonto.
Pase que ponga su mote, pero que ponga la dirección de su casa es ya el colmo del despropósito, le faltó poner el número de movil para que los clientes interesados le llamaran antes para concertar cita... increible...
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