Azul. En general, el azul ha salido muy bien parado, me gusta, tiene algunas cartas muy jugables y realmente me ha sido difícil decantarme por cual carta elegir.
La carta común que he elegido es un clásico, Fuga de Maná, carta que ha demostrado sobradamente que tiene calidad y muy jugable. En general, hay muy buenos contrahechizos en la Duodécima Edición.La Infrecuente que he elegido es Convertir en Rana, que se puede usar para ganar tiempo o como anticriaturas. Estoy seguro que es muy divertida de jugar.
La Carta rara es Visiones del Más Allá, para mí la carta de la ampliación, las barajas de Dragar o Revienta Mazos van a hacer una fiesta con ella.La Mítica que he elegido es el Caminante, podía haber elegido el nuevo Time Twister pero me gusta más ésta por eso de lanzar Vislumbrar lo Impensable de gratis. Ya os digo, una fiesta.
Blancas. Mal color, muy malo, poco poderoso y sin cartas desequilibrantes ni que resalten sobre las demás. Mediocre.
La común y la infrecuente son dos clásicos, Pacifismo y Anillo del Olvido. Que hayan pasado esta última a infrecuente es un vergüenza. Las demás comunes e infrecuentes tienen una calidad muy triste, salvando la honrosa excepción de la Vanguardía de Elite.
La rara y la mítica no han sido difíciles de elegir porque las demás eran tan malas que no servían ni para estar escondidas (salvo Día del Juicio Final, por supuesto).Que no te puedan jugar nada durante tu turno sirve para que al menos puedas atacar y jugar tú sin esperar que alguien te de una sorpresa (sobretodo los azules). El titán es un bicharraco enorme que da caña, algo que el blanco siempre agradece.
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