TODO LO QUE DEPENDA DE UNO MISMO ES POSIBLE
"Que tus labios no firmen cheques que tu culo no pueda pagar"

CIENCIAS OCULTAS (II)

¿Ciencia o magia?, ¿voluntad o destino?. Poco a poco los secretos se desvelan a través de lo mas profundo de nuestro ser, y al contrario que los antiguos no viene dado por el alma, si no por la incógnita que en nuestro siglo aun no nos ha sido revelado. Los genes.


- EL GEN QUE NOS HACE INFIELES.


Una mutación presente en el 40% de los hombres condiciona su capacidad de compromiso y lealtad con su pareja.

Al final, puede resultar que engañar a la pareja sea simplemente cuestión de tener o no un gen. Al menos, en los hombres. Y
tiene un nombre, la variante 334, que la ciencia acaba de encontrar.

Esta mutación es un enlace directo entre los genes del hombre y su aptitud para la monogamia. Investigadores del Instituto Karolinska de Suecia han publicado en la revista científica Proceedings of the National Academy of Sciences los resultados de un estudio según el cual los hombres que carecen de la variante de un gen que influye en la actividad del cerebro tienen mayor capacidad de compromiso con la mujer.

“No
puede ser utilizado para predecir con ninguna precisión el comportamiento que tendrá un hombre en una futura relación", asegura Hasse Walum, investigador del Instituto Karolinska.

Técnicamente, dicho gen forma un receptor para la vasopresina, una hormona que se encuentra en muchos mamíferos. En general, las personas que presentan mayor preferencia por mantener una pareja estable tienen los niveles de dopamina, oxitocina y vasopresina aumentados. ¿Y esta hormona no podría afectar también al comportamiento de las mujeres? Los científicos estudiaron a los hombres porque se sabe que la vasopresina desempeña un papel más relevante en su cerebro que en el de las mujeres.

El estudio lo han realizado con 1.100 personas (550 hombres gemelos suecos y sus correspondientes parejas o esposas). La variante del gen, el alelo 334, está presente en dos de cada cinco varones del estudio. La variante de este gen influye, asimismo, en las posibilidades de que existan problemas de convivencia en el matrimonio o en la relación de pareja.

Los investigadores suecos han encontrado que los hombres que llevan una o dos copias de la variante del alelo 334 se comportan a menudo de forma diferente en las relaciones de pareja, que los hombres que carecen de esta variante del gen.


- EL GEN FUMADOR.


Probar el cigarrillo es parte de un rito común entre muchos adolescentes, pero disfrutarlo o no depende de la genética.

Científicos de la Universidad de Míchigan identificaron una mutación genética frecuente en personas que sintieron una fuerte sensación agradable con su primer cigarrillo.
Los pertenecientes a este grupo son más propensos a convertirse en fumadores habituales, apuntó el estudio.

El gen en cuestión, el CHRNA5 fue identificado por otros estudios vinculados a la adicción a la nicotina, y se cree que podría incrementar la posibilidad de desarrollar cáncer de pulmón.

Los datos genéticos se obtuvieron de 435 voluntarios: fumadores regulares y personas que lo probaron alguna vez a los que se les interrogó sobre lo que sintieron al dar su primera calada.


- EL GEN EGOÍSTA DE LOS DICTADORES.

Benito Mussolini, Hitler, Mobutu, Pinochet o, más de actualidad, ego podrían tener su gen AVRP1 más corto que otros seres humanos, lo que afectó, y aún afecta en el último caso, a su capacidad de ser generosos con los demás.

En concreto, como ya se descubrió en 2005, el AVPR1 es el gen que posibilita que una hormona llamada vasopresina actúe sobre las células cerebrales. Esta hormona está asociada a la creación de vínculos sociales y afectivos, lo que supone una mayor tendencia al altruismo a medida que se tiene una mayor cantidad de vasopresina.

Los descubridores de la función de este gen en el comportamiento de los tiranos son investigadores de la Universidad Hebrea de Jerusalén, que diseñaron un experimento económico al que bautizaron como El juego del dictador, para comprobar qué personalidades son más tendentes al egoísmo más extremo. Sus resultados los han publicado en la revista 'Genes, Brain and Behaviour' de este mes'.

El ejercicio consistió en dar una cantidad de dinero a un grupo de sujetos y comprobar si se repetían unas particularidades genéticas en quienes estaban menos dispuestos a compartir. En concreto, se buscaron 203 estudiantes de ambos sexos que tenían (al igual que sus padres) genotipos del gen AVPR1 con diferentes versiones.

Distribución de riqueza

Se les dividió en dos grupos: dictadores y receptores. A los primeros se les facilitaron 50 shekels (unos 14 dólares) y se les indicó que, cada uno, podía quedarse ese dinero o distribuirlo con los jugadores receptores.

Por cada shekel que se quedaran, recibirían otro y por cada uno que dieran, el receptor también tendría otro más. En definitiva, un juego en el que el viejo refrán de "es mejor dar que recibir" perdía su sentido si se trataba de aumentar la riqueza, mientras que la fortuna del receptor dependía totalmente de lo que el dictador tenga a bien otorgarle.

Al final, cerca del 18% de los dictadores optó por quedarse con todo el capital, casi la mitad dieron más o menos el 50% y hubo un 6% que lo distribuyó todo. El sexo, en estas decisiones, no supuso un rasgo diferencial.


- EL GEN DE LA BARBARIE

La barbarie, cuya genealogía se remonta naturalmente a tiempos prehistóricos viene dada por la genética mas que la sociedad, ¿o no?

Aunque hasta ahora no se han encontrado evidencias de la existencia de un “gen de la violencia”, investigadores norteamericanos han descubierto que una variación genética en una de las enzimas catalizadoras de elementos químicos en nuestro cerebro, propicia que, ante determinados estímulos, nuestros cerebros reaccionen más violentamente que otras personas que no sufren dicha variación genética. Esta reacción, observada mediante imágenes de resonancia magnética en los cerebros de más de 100 personas, conforma un patrón genético que sí podría propiciar el comportamiento agresivo en un individuo, independientemente de la influencia que puedan ejercer otros factores ambientales.

En este caso, es un gen X relacionado con la oxidasa monoamina A MAOA, que es una enzima encargada de catalizar la oxidación de monoaminas y que está presente en diversas células del organismo humano, como las neuronas del cerebro. La variación genética en este caso afectaría al funcionamiento de la MAOA, produciendo determinadas reacciones cerebrales anómalas, es decir, violencia.



- EL GEN DE LA OBESIDAD.

Los científicos británicos descubrieron que el gen conocido como FTO, vinculado con la obesidad
, también tiene un efecto en la regulación del apetito. Según la observación realizada, los niños que tienen dos copias de la variante de alto riesgo de ese gen no experimentan saciedad después de haber comido, lo cual probablemente los lleve al sobrepeso.

El estudio realizado por especialistas del Colegio de la Universidad de Londres y del Instituto de Psiquiatría del King's College de Londres fue realizado en 3.337 niños británicos de 8 a 11 años y los resultados han sido publicados en el Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism.

De acuerdo a especialistas, el FTO es el gen más vinculado con la obesidad y se sabe que los adultos que tienen dos copias de la variante de mayor riesgo del gen pesan, en promedio, tres kilos más; y que las personas con una sola copia de esa variante tienen 1,5 kilo más de peso.

Los científicos también observaron que por sí solos, los efectos del gen eran relativamente pequeños. Esto implica que probablemente haya varios genes que contribuyan a la obesidad y al apetito; que cada uno tenga una pequeña incidencia; y que, en conjunto, todos provoquen un efecto importante.

2 Críticas constructivas:

EGO dijo...

Ejem... ¿no había otra foto que poner? y siendo mía, ¿no pudiste poner la foto que yo publique?

Claro, la mía es mas... como decirlo, ¿llamativa?

Curiosa la naturaleza de los genes.

Phidas dijo...

La genética influye en todo, no solo en los supuesto indicados (fidelidad, vicios, egoismo, violencia y sobrepeso) sino yo diría que en todos los ámbitos de la vida.

Creo que hay 3 factores más que influyen en como somos. Los hábitos y educación de las personas, la sociedad y los productos químicos que se emplean en nuestra vida cotidiana. Estos 3 factores también tienen un gran peso en el "como somos".

Los genes son de gran importancia pero necesitan de los otros factores para comprenderse totalmente.